¿Cómo afecta la tecnología a los adolescentes? Esta es una pregunta que muchos padres, educadores y profesionales se hacen ante el creciente uso de internet, las redes sociales y los dispositivos electrónicos por parte de los jóvenes. Para responder a esta cuestión, UNICEF España ha realizado el estudio más amplio hasta la fecha en nuestro país y en Europa sobre este tema, con la participación de más de 50.000 adolescentes de entre 11 y 18 años de 265 centros educativos.
El informe «Impacto de la tecnología en la adolescencia«: relaciones, riesgos y oportunidades» ofrece una fotografía muy precisa sobre cómo usan la tecnología los chicos y chicas de nuestro entorno y, sobre todo, cómo se relacionan a través de las pantallas. El estudio aborda aspectos como el tiempo dedicado a las actividades online, el tipo de contenidos que consumen o generan, las formas de comunicación que emplean, las ventajas e inconvenientes que perciben, los riesgos a los que se enfrentan o las medidas que toman para protegerse.
Los resultados del informe revelan una realidad compleja y diversa, en la que conviven aspectos positivos y negativos del uso de la tecnología por parte de los adolescentes. Por un lado, se constata que la tecnología les ofrece múltiples beneficios para su desarrollo personal, social y educativo: les permite acceder a información variada y actualizada, expresar su creatividad e identidad, mantener el contacto con sus amigos y familiares, ampliar su red social o apoyar causas sociales. Por otro lado, se evidencian también algunos riesgos asociados al uso problemático o excesivo de la tecnología: interferencia con otras actividades importantes como el estudio o el deporte, exposición a contenidos inapropiados o falsos, acoso o ciberbullying, sexting o envío de imágenes íntimas sin consentimiento, adicción o dependencia emocional .
Según el informe de UNICEF España, uno de cada tres adolescentes estaría haciendo un uso problemático de estas tecnologías; es decir, que pasa un número de horas muy elevado en internet y las redes sociales, y que eso interfiere en su día a día: educación,
relación con su familia y amigos, desarrollo personal en otros ámbitos…
Además, el estudio muestra que hay diferencias significativas según el género, la edad
y el nivel socioeconómico de los adolescentes, lo que implica la necesidad de adaptar las estrategias educativas y preventivas a cada grupo.
Ante esta situación, UNICEF España propone una serie de recomendaciones dirigidas a los diferentes agentes implicados: familias, educadores, administraciones públicas, empresas tecnológicas y medios de comunicación. Entre ellas, destacan:
- Promover un uso saludable e inclusivo de las tecnologías entre los adolescentes,
basado en el respeto, la responsabilidad y la participación activa. - Fomentar el diálogo y la confianza entre padres e hijos sobre sus experiencias online, así como establecer normas y límites consensuados.
- Incorporar la educación digital como una competencia transversal en el currículo escolar, desde edades tempranas.
- Garantizar el acceso equitativo a las tecnologías digitales para todos los adolescentes, independientemente de su situación económica o geográfica.
- Proteger los derechos y la privacidad de los adolescentes en internet, evitando su exposición a contenidos nocivos.
Investigación: Andrade, B., Guadix, I., Rial, A. y Suárez, F. (2021). Impacto de la tecnología en la adolescencia. Relaciones, riesgos y oportunidades. Madrid: UNICEF España.